Solo en la parada del autobús, para el 2, absolutamente vacío. Me subo (todavía solo) y pongo un billete de cinco euros en la bandeja del autobusero. Me mira con cara de chungo (sus gafas de sol ayudaban bastante) y me espeta:
- Cuántos billetes quieres? Cinco?
- Sí, para mí y para mis cuatro amigos
- Cuántos billetes quieres? Cinco?
ResponderEliminar- ¡¡Por el culo te la hinco!!
Jojojo, soy un maestro del humor.
Yo sigo sin verle la gracia...
ResponderEliminar